Fruto de las horas interminables en el ordenador y de la búsqueda de excusas baratas para postergar el estudio, se descubren muchas cosas por Internet. Algunas, interesantes; otras, todo lo contrario. Sabéis que soy un seguidor de Eurovisión, sin fanatismos, claro, pero sin perderme ni siquiera las semifinales. Adoro la música, adoro los programas bien producidos y adoro el intercambio de culturas. Suecia esta noche celebra el final de su Melodifestivalen, un festival qué canción va a Eurovisión. Este programa cada año rompe los audímetros en Suecia y, además, contribuye a descubrir nuevos talentos. ABBA y Loreen son dos buenas muestras de ello, pues desde su aparición en el Melodi han sonado en las radiofórmulas europeas sin descanso. Pero, esta entrada no es para hablar de este festival, ni de Eurovisión.
En verdad, quería daros a conocer cuatro temas que, ya sea para odiar o amar, merece la pena escuchar. Temas que se han dado a conocer en este festival y que, a mi parecer, podrían gozar de una vida longeva, o al menos, una vida que fuera más allá del certamen.
1. EKO - Red. Música electrónica, pop, alternativa, enigmática e introspectiva. Es de esas canciones que, al principio se subestiman, pero que luego son irresistibles. Modo repeat echando humo. Por cierto, este grupo sueco se dio a conocer gracias a un concurso radiofónico, que acabaron ganando. Por desgracia, quedaron últimos en su semifinal. Una posición totalmente inmerecida. Sin más preámbulos, ya podéis escucharla.
2. ACE WILDER- Busy Doin' Nothin'. Su carrera es corta; su talento, ilimitado. O eso se intuye. La parte más cañera, más ruidosa, es un tanto ridícula, para una fiesta de fin de curso en la escuela da el pego, pero para un festival europeo, no. Sin embargo, el resto de la canción es maravillosa, original, algo Avicii y moderna. En Suecia Ace Wilder huele a victoria y a éxito. En efecto, los indicios ya se han manifestado tras conquistar el primer puesto en iTunes y Spotify.
3. HELENA PAPARIZOU - Survivor. La cantante griega, que ya ganó el Festival de Eurovisión en 2005, regresa esta vez con la intención de representar, esta vez, no a Grecia, sino a Suecia. Ha llegado a la final a través del Andra Chansen (la repesca) y ojalá ganara, porque su rotundidad, su sonido actual sin olvidar sus raíces y su toque épico constituyen sus mejores bazas.
4. ALCAZAR - Blame It On The Disco. Un grupo veterano en el Melodifestivalen. Podría ser el nuevo ABBA. Es actual y, a la vez, casposa. Un schlager rotundo con una magistral puesta en escena. Con todo, para mi gusto, el tema peca de hortera, demasiado gay (parece estar muy enfocada a recoger los votos del sector homosexual, dejándonos de lado al público en general). Visto lo visto, alguno se preguntará por qué la he incluido si no me convence. Pues porque el resto de canciones del Melodifestivalen no ha sido muy bueno y cuando alguna actuación está tan bien preparada, cuidada al milímetro, pues soy incapaz de excluirla de la lista. Además, la diversidad de gustos siempre es positiva.
5. SANNA NIELSEN - Undo. Edito este post con la ganadora del certamen, que, si bien no me convenció al principio, poco a poco me ha ido ganando. Goza de la magia y el poco hipnótico de las grandes baladas, pero si estás cansado o cansada de temas lentos, mejor ni la escuches. Además, es un ejemplo de constancia y lucha, pues después de seis intentos frustrados, ha conseguido ganar el Melodifestivalen.
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